Ayer en sus acostumbradas charlas de los Jueves, el profesor Reynaldo Charres Vargas, a dicho: que las actividades, las prácticas, los ejercicios y las reglas que facilitan la aplicación ordenada y apropiada del pintado con lápices de colores, son en esencia tareas simples, felices y siempre van acompañadas de melodías agradables... "La asociación de la plasmación colorística con la música es inseparable", añadió.
Las artes en general, tienen virtudes implícitas que nunca debemos dejar de valorar porque sirven de coraza ante la degradación, la agresión,la destrucción y la fealdad de las cosas. En cambio nos ofrecen inspiración para crear, fortalece la sanidad espiritual y la inmensidad de los sentimientos, nos permiten disfrutar de la belleza de la existencia; igualmente, hacen aflorar el calor humano, el pensamiento optimista y la actitud benévola.
Mujeres y hombres del Perú y de todo el planeta, tomemos conciencia del poder de las artes y hagamos que sean nuestros aliados, para liberar las bondades y los valores que todos los humanos tenemos en nuestros cerebros. Y colorear con lápices es una buena manera de hacerlo.
Las sonrisas de estas niñas, nos dicen que las artes hechas con lápices son magníficas, felices y musicales.
